Una agradable visita

Este sábado que recién pasó tuvimos, junto con la Vane, la posibilidad de visitar al Kako, que en realidad se llama Oscar, un amigo de varios años.
La Vane lo conoce desde mucho antes y estuvo muy grave.
Cuando llegamos habían hartos amigos que lo quieren mucho y eso me alegró.
Como había mucha gente le pedí a Dios que me diera la oportunidad de hablarle, que era mi intención desde un principio. No me interesaba tanto si se estaba recuperando o si lo iban a operar, sino que su realidad más profunda.
No me mal entiendan y sigan leyendo.
Cuando el ser humano pasa por crisis tan graves como las que el pasó, comprende y vive lo que es estar a pasos de encontrarse con Dios. Conversamos y me dijo que en un momento pensó que iba a morir. Yo le compartí lo poco que pude de la salvación y la fe con la que me encontré con Cristo (aunque en realidad El me encontró). Para mi alegría, me dijo que al escucharme era como escuchar a su primo que también es Cristiano y tiene intenciones de ser pastor.
Solo Dios puede cambiar el corazón y la realidad del ser humano y a veces lo hace a través del dolor. A Dios no le agrada ver sufrir al ser humano pero sucede. Lamentablemente, cuando el salga del hospital, la realidad externa no va a cambiar, sus llamados amigos (no lo digo por todos) van a estar rodeados de las mismas tentaciones y vicios que lo tienen en ese estado. Con mucha tristeza lo digo, porque algunos fueron a verlo, a darle animo con resaca, y se supone que lo queremos ver mejor, incluso oramos a Cristo para su salud y uno de los supuestos lideres (no se si aun lo será) que antes estaba con el, me dijo que tenía Facebook para buscar “minas.”
Ojala Kako pudieses leer esto. No soy perfecto. Cristo me cambió y me sacó del engaño que había en mi vida y de la Vane. Solo El puede defenderte y cambiarte a ti y tus amigos y amados. Escucha a tu primo, Cristo está con el.
La Salvación no es un juego y tú la tienes al alcance de tu mano.
Un abrazo para ti y tu familia.